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Alimentación y nutrición del deportista

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3. nutrición

Alimentación y nutrición, conceptos diferentes pero íntimamente ligados entre si. El primero de ellos, la alimentación, consiste en una acción voluntaria de introducir en nuestro organismo productos ya sean naturales o transformados a los que llamamos alimentos, para obtener de ellos los nutrientes necesarios que puedan satisfacer nuestras necesidades biológicas. En el caso de la nutrición, se trata de un proceso involuntario, que se inicia con la deglución de los alimentos en la boca y concluye con la absorción por parte del organismo, de los nutrientes que forman parte de los alimentos que ingerimos.

Así pues, en nuestras manos está el llevar a cabo una correcta y sana alimentación, lo que nos permitirá que lleguen a nuestro organismo los nutrientes para disfrutar de una buena salud y, en el caso de los deportistas, disponer de la energía necesaria para el ejercicio físico que vayamos a realizar.

Seguro que habéis oído más de una vez, esa frase tan manida de “somos lo que comemos”. La nutrición es un factor ambiental que puede ser controlado a través de una correcta alimentación. Conocer nuestras necesidades nutricionales y aprender a alimentarse, serán algunos de los factores fundamentales a la hora de mejorar nuestro rendimiento deportivo. No os quepa ninguna duda.

¿Cuáles son los objetivos fundamentales de una correcta alimentación/nutrición?

1) Suministrar energía al organismo (aportada principalmente por algunos macro nutrientes como los carbohidratos y lípidos). 2) Aportar el “material” necesario para la construcción y renovación de estructuras corporales (gracias a la función que llevan a cabo las proteínas y aminoácidos). 3) Suministrar las sustancias necesarias que ayuden a regular las reacciones químicas de nuestro organismo (minerales y vitaminas). Pero también; 4) Evitar una deficiencia o exceso de nutrientes, mantener el peso adecuado y prevenir enfermedades.

La dieta de un deportista no puede ser homogénea, sino que variará y se adaptará en función del programa deportivo: fase de entrenamiento, pre-competición, competición, fase de recuperación, descanso, … Conocer los requerimientos en función del tipo de deporte, del deportista y del tipo de entrenamiento, constituirá la base fundamental que nos permita mejorar nuestro rendimiento deportivo.

Aunque no es fácil cuantificar la incidencia que pueda tener una correcta alimentación sobre el rendimiento deportivo, ya hemos mencionado en un post anterior que, en unas mismas condiciones genéticas, de entrenamiento, etc, la alimentación podría contribuir en un 5% sobre el rendimiento total y la podríamos englobar dentro de lo que se ha venido en llamar, el “entrenamiento invisible”.

En posteriores posts, profundizaremos en la función que tienen los diferentes macro y micro nutrientes, sobre la nutrición y sobre nuestro rendimiento deportivo.

 

Andreu Canals
Lic. Químicas y Master Universitario en Nutrición
Entrenador Nacional de Ciclismo

 

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